viernes, 29 de abril de 2011

Tu carga.

Buenas noches pueblo: un cuento.
El maestro zen entró en el pueblo polvoriento mientras los luareños dormían la siesta.
Era un pueblo desértico y no se veía un ánima.
Tras reponer víveres y rellenar las cantimploras con agua lo abordó un muchacho.
-Maestro,quiero seguirlo en su viaje.
-No voy a ningún sitio.
-Insisto en acompañarlo,deseo apender.
-Quien desea fracasa, y girándose emprendió la marcha.
El muchacho se convirtió en alumno al seguirlo.
Caminaron largo rato hablando de cuestiones universales en la cotidianidad de sus vidas.
-Maestro me abruma la sensación de no poder acaparar todo aquello que me propongo.Todo me fascina.
-Muchacho,lo que no puedes abarcar quizas no debas abarcarlo.Acepta tus limitaciones y bendice lo que la vida te ofrece.
Sin darse cuenta les sobrevino la noche y acamparon con las estrellas como único techo.
Se tumbaron junto al fuego que el alumno no vió encender al zen y se dispusieron a dormir.
-Cuenta las estrellas,dijo el maestro.
El alumno comenzó a contar y su estado se alteraba estrella a estrella ante la abrumadora inmensidad celestial.
-No puedo maestro,esa sensación me hiela el alma.
El maestro se acomodó para dormir.
-Vuelve al pueblo.Tu carga es demasiado pesada para este viaje.
Y se durmió.
Buenas noches y buen fin de semana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario